Semillas en el suelo de la fe

Semillas en el suelo de la fe

 

Hace tres semanas, sembré estas «semillas» en una maceta. Era sólo por diversión, para ver si algo pasaría. ¡Y algo pasó!

¿No es increíble cómo mis camotes han crecido en sólo tres semanas? Estoy muy entusiasmada con mi experimento. ¡Pero hay un gran problema! La maceta es demasiado pequeña. No hay espacio para que crezcan nuevos camotes. Eso es algo que debería haber tenido en cuenta desde el principio. Supongo que sólo tendré que disfrutar de las hermosas hojas verdes y olvidarme de la cosecha.

He estado pensando esta mañana sobre todo lo que hay que aprender de la semilla, el terreno, el riego, el crecimiento… cada pequeño componente tiene una lección espiritual que enseñarnos.

Una de las principales lecciones es la FE. Hay que tener fe en la semilla. Todo sembrador cree en el poder de la semilla; si no, ¿para qué sembrar? Además de la fe en la semilla, hay que tener fe en el suelo o terreno, fe en el sol y en la lluvia; pero sobre todo hay que tener fe en el Creador de la semilla, el Hacedor del terreno, el sol y la lluvia.

Generalmente no pensamos en esto. Damos muchas cosas por sentado. Pero hay una poderosa fuerza escondida en una semilla. Mi «semilla» de camote es grande; pero hay el mismo poder en la más pequeña de las semillas, como la semilla de mostaza de la que Jesús habló.

Decía también: ¿A qué haremos semejante el reino de Dios, o con qué parábola lo compararemos? Es como el grano de mostaza, que cuando se siembra en tierra, es la más pequeña de todas las semillas que hay en la tierra; pero después de sembrado, crece, y se hace la mayor de todas las hortalizas, y echa grandes ramas, de tal manera que las aves del cielo pueden morar bajo su sombra. Marcos 4:30-32

 Jesús les dijo: Por vuestra poca fe; porque de cierto os digo, que si tuviereis fe como un grano de mostaza, diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y se pasará; y nada os será imposible. Mateo 17:20

No importa si es grande o pequeña, hay el mismo potencial en una semilla. Pero hay una cosa necesaria para ver el crecimiento, y eso es paciencia. ¡Tienes que creer que algo está pasando bajo tierra! Si desenterrara mi «semilla» de camote para comprobar cómo está creciendo, ¡lo arruinaría todo! La evidencia que veo por encima del terreno me dice que algo está sucediendo en la oscuridad, en el mundo «invisible». A su debido tiempo, puedo esperar la cosecha, ¡pero no ahora! En este caso, no habrá nuevos camotes porque no he proporcionado el ambiente que necesita esta semilla. ¡No hay espacio para el crecimiento!

Podría seguir con las lecciones para aprender; pero te dejaré para que medites en esto. Es posible que tengas mucha más experiencia que yo en la siembra y la cosecha. Te daré aquí una cita sobre lo que pasa en el reino espiritual. La fe es lo que dirige nuestra vida y nuestra experiencia con Dios. Cuando Jesús anduvo en la tierra, buscaba la fe en la gente. Una y otra vez solía decir que alguien tenía «fe para ser sanado», ¡y la persona fue sanada! «Tu fe te ha hecho sano», decía Jesús.

Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera,
la convicción de lo que no se ve.
Hebreos 11:1

¡Yo he plantado una semilla en el suelo de la fe! ¡La regaré con oración! Y confiaré en el Creador de la «semilla» para que algo increíble suceda.

Te lo contaré en pocas palabras. Tal vez puedes proporcionarme algunos recursos o conoces a alguien que me pudiera ayudar. Lo que quiero hacer son unos videos de quince minutos de Sal y Pimienta y el Club Tesoros. Creo que sería una manera divertida de enseñar a los niños lecciones de vida. Si no conoces a Sal y Pimienta, búscalos aquí:

clubperlita.wordpress.com

Tengo que convertir las historias en episodios de video. También pueden ser dramas de títeres. O pueden ser dramas que los niños actúen. Las posibilidades son infinitas.

Esta es la más reciente «semilla de fe» que he sembrado en el «suelo de la fe». Necesito ayuda.

  • Necesito CREATIVIDAD para escribir los episodios.
  • Necesito GENTE que me ayude a realizar esto.
  • Necesito DINERO para pagar por el proyecto.
  • Necesito RECURSOS técnicos de toda clase.
  • Necesito FAVOR, ¡el favor de Dios y de los hombres!

¿Me ayudarás a orar por este proyecto? ¡Y por todos los otros proyectos que tengo en marcha! Se podría pensar que a mi edad me habría quedado sin ideas (¡ya pasé a la etapa de los 70!). Es lo contrario. ¡Tengo tantas ideas que necesitaría otra vida para realizarlas todas!

Una cosa más. Tengo una mano de ayuda. ¿Orarás por mis ayudantes?

  • CRISTINA es mi asistente en el Perú. ¿Qué haría sin ella?
  • ABSALOM es mi excelente artista en Costa Rica.
  • XIMENA es mi querida amiga y ayudante en Bolivia.
  • NANCY es mi amiga en Estados Unidos que traduce mis historias al inglés.
  • PILAR es una profesora en México que hará el audio para los videos que tenemos.

Esto será todo por hoy. ¿Tiene semillas para sembrar? Ponlas en el suelo de la fe y cúbrelas de oración. ¿Qué grandes maravillas hará el Creador de la Semilla? ¡Eso está por ver! Confía en el Señor y espera milagros.

¡Que Dios siga bendiciendo tu vida sobremanera!

 

About the Author

Redactora de materiales pedagógicos con la gran pasión de difundir el amor de Dios y su poder salvador.