Hoy tuvimos una recepción para celebrar la jubilación de mi amigo y compañero de trabajo Guido Féliz. “Celebrar” quizá no sea la palabra adecuada ya que pudiera dar a entender que nos complace que deje su puesto. De ninguna manera; pero a todos nos llega el momento en que tenemos que pasar el testigo a quienes seguirán en la carrera llevando adelante la obra de Dios.
El Dr. G., como le digo por cariño, es un hombre muy talentoso que por medio de la escritura ha contribuido en gran manera al avance de la obra de Dios. Yo lo conozco desde el 2001. He aprendido de él muchísimo acerca del bien escribir y uno de mis proyectos en ciernes es recopilar toda esa enseñanza para beneficiar a la naciente generación de escritores. Tengo sus Cápsulas Idiomáticas, sus Gajes del Lenguaje, sus Cuentagotas, su Gramatiquerías, y cuantas otras enseñanzas para mejorar la escritura del bello idioma de Castilla.
Desde 1992 Guido ha trabajado con las Asambleas de Dios en Springfield, Missouri, en funciones de redactor y corrector de estilo de los materiales publicados en español. Incontables veces he consultado con él sobre dudas del idioma, y nos hemos hecho bromas porque a él le hace mucha gracia que yo sea sueca y que no tenga que hacerme la sueca porque ya lo soy. Él por su parte es Bellavista porque ve muy bien las cosas y no es ciego.
Nuestro amigo Jorge, que dicho sea de paso, me ha ayudado a armar esta página para mis escritos, es quien ha dibujado la caricatura. Él es mi maestro en cosas de la web y esta noche he aprendido pasos en el proceso que beneficiarán a ustedes mis lectores. Volviendo a casa para acompañarme con «Soledad», estuve pensando en mi amigo Bellavista y la satisfacción que debe sentir por haber cumplido las tareas que Dios ha ido poniendo en sus manos al correr de los años, y de allí el título “El gozo de terminar triunfante la carrera”.
Divagaron mis pensamientos desde el Dr. G. hacia Pablo y sus palabras de despedida cuando había reunido a los ancianos de Éfeso, palabras que yo he escogido como lema de mi vida: “Pero de ninguna cosa hago caso, ni estimo preciosa mi vida para mí mismo, con tal que acabe mi carrera con gozo, y el ministerio que recibí del Señor Jesús, para dar testimonio del evangelio de la gracia de Dios” (Hechos 20:24).
Si las cosas siguen su curso normal pronto me tocará a mí retirarme de mi trabajo y dejar campo a otros. Yo tengo la cabeza llena de planes para el día que me jubile, no para sentarme con los brazos cruzados y esperar el toque de trompeta cuando se anuncie que Cristo viene por su Iglesia. ¡No señores! Dios me ha dado la visión de difundir la “Semilla de amor” y con su ayuda quisiera ser trotamundos para llevar a los lugares más recónditos el evangelio de Jesucristo.
Basta una semilla para que haya crecimiento en abundancia. Por más pequeño e insignificante nos parezca lo que hagamos en bien del prójimo Dios lo puede multiplicar de la más increíble manera. Esta página es una semilla que estoy sembrando en nombre de Cristo y por fe pido a Dios que tenga a bien usar mi pequeño esfuerzo para tocar millones de vidas.
Hoy honramos Guido por su fiel servicio. Ya no nos acompañará en persona en el departamento de español de Gospel Publishing House, pero lo llevamos en el corazón, y para que él todavía se sienta útil y sepa que lo necesita “la sueca que no se hace la sueca porque ya lo es”, voy a abstenerme de corregir lo escrito para que Guido siga con su trabajito de corrector de estilo.
¿Cómo estás llevando la carrera? ¿Eres fiel al llamado de Dios en tu vida? ¿Usas los talentos que Dios te ha dado? Cuando te toque pasar el testigo a quien te sigue en la carrera, ¿lo harás triunfante porque corriste con empeño?
Guido, además de escritor y corrector de estilo es poeta y músico. Voy a terminar con uno de sus poemas de reflexión. Me gustaría insertar aquí las “musiquillas de cosquillas” que me mandó hace unos días. Lamentablemente el sistema de verificación de virus detectó algo que no quiso aceptar mi correo electrónico. Tal vez es mejor, ¡de pronto me hubiera muerto de cosquillas!
PLEGARIA
Señor,
hazme vaso de tu amor,
renuevo de tu vida,
objeto de tu gracia,
heraldo de tu verdad,
instrumento de tu poder,
reflejo de tu sabiduría,
ejemplo de tu justicia.
Tú, el AMOR –yo el vaso.
Tú, la GRACIA –yo tu objeto.
Tú, la VIDA –yo tu renuevo.
Tú, el PODER –yo tu instrumento.
Tú, la VERDAD –yo tu heraldo.
Tú, la SABIDURÍA –yo tu reflejo.
Tú, la JUSTICIA –yo tu ejemplo.
Guido Féliz (dominicano)
Gracias y mas Gracias por recordarme el compromiso que uno hace con el Señor y trabajar en su viña,Dios me concedió mas años de vida para su servicio y eso haré,hace 10 años prolongó mis dias sobre la Tierra,a veces quisiera salir por el mundo llevando su mensaje,porque de donde El Señor me sacó de lo mas profundo de donde,solo El pudo sacarme por eso su Palabra dice de Lo Vil y Menospreciado Dios llamó…..